Todo el mundo conoce una naranja y su anatomía: corteza y gajos. Pero su anatomía es un poco más compleja. En este post, os vamos a explicar sus partes.
La partes principales de una naranja son:
Exocarpo o Flavedo: es la cáscara o corteza, pero sólo la parte naranja. El exocarpo o flavedo está formado por una epidermis e hipodermis que es de color verde cuándo aún no está madura y naranja cuando ya está en su punto de maduración. Esta parte está compuesta de pequeñas vesículas que contienen aceites esenciales que se utilizan principalmente para realizar perfumes y aromatizantes.
Mesocarpo o Albeldo: Esta parte también forma parte de la cáscara de la naranja. Su aspecto es esponjoso y de color blanco. Es la que contiene más pectinas y se utiliza principalmente para la realización de mermeladas aunque también es rica en glucósidos.
Endocarpo o pulpa: Es la parte que nos comemos de la naranja y del resto de cítricos y supone el mayor porcentaje de su peso. Está formado por gajos o sacos de zumo y las semillas. Aquí es donde se encuentran los diferentes ácidos orgánicos (como la vitamina C) azúcares y agua que aportan esta fruta. Dentro del endocarpo o pulpa podemos encontrar las siguientes partes:
Septas o membranas: son las paredes que separan los gajos.
Semillas: son la simiente del árbol.
Eje central: es la parte central de la naranja. Así como el mesocarpo o albeldo su aspecto también es esponjos y de color blanco.